Estos últimos nueve días -en lo personal y estrictamente runner, claro- han estado marcados por el mal resultado del domingo 14 de diciembre en el 7è Cros d'Alella. Sin duda, quería volver a encontrarme bien tanto a nivel físico y de salud como a nivel mental y anímico. Vamos, recuperar -buenas- sensaciones.
Empecé muy mal dicha 'recuperación', sin correr, ni el lunes 15 ni el martes 16. ¿El motivo? El cansancio y el malestar físico que arrastraba. Pero como uno es como es, pese a estar algo mareado y febril, volví a correr el miércoles 17: salieron 5 km de rodaje esperpénticamente lento, y es que tuve unas malas sensaciones increíbles (sin molestias, pero con la sensación de que algo no iba bien dentro de mí). Llegó el jueves 18: dudas, ganas de enterrar fantasmas, etc. Por suerte, me encontré bastante bien y pude hacer un entrenamiento 'de calidad' bastante chulo: hice rodajes cortos y suaves, sprints en rampa, series cortas y un rodaje en progresión. Pero luego, fue un poco volver a lo mismo: por X motivos, no salí a correr ni el viernes 19 ni el sábado 20. Volví a correr anteayer (domingo 21), esta vez por el Montseny (¡cómo me alienta esta zona!): eso sí, anduve más que corrí, pero hice bastante ejercicio. Ayer (lunes 22) volví a descansar; más que nada por falta de ganas.
Como dejo entrever, no han sido días muy fructuosos. Pero en fin, estas cosas van por rachas; y yo soy mucho de hacer las cosas por ganas, corazón, instinto, etc. Y la verdad es que ahora, claro, no tengo especiales ganas de acumular kilómetros (no por nada en especial). Yo creo que sí tendría ganas si viviera en mi pueblo -Vilviestre del Pinar (Burgos)- o incluso en Viladrau o un pueblo de ese estilo. Pero vivir en Barcelona es lo que es, con sus pros y sus contras, y a mí no me alienta mucho para salir a correr (tampoco la sierra de por aquí, Collserola). Aún así, sé que mis ganas de correr volverán, y pronto, porque es una parte importante de mí. De hecho no descarto salir esta tarde de martes 23 de diciembre (a ver cómo estoy de ganas y compromisos varios). Ya os contaré.
En todo caso, creo que estas fechas -navideñas- son buenas para entrenar (en Barcelona no hace mucho frío), coger fondo, recuperar sensaciones, etc. Me gustaría aprovecharlas, sobre todo teniendo en cuenta que en diecinueve días tengo el 33è Cros Vila de Ripollet (11 de enero) y una semana después el Cros Popular del 54è Cros de Sant Sebastià (18 de enero; Sabadell). En fin, ya veremos cómo va.
Como siempre, agradeceros que sigáis mi blog (así como agradeceros otras cosas).
¡Felices Fiestas a tod@s! ¡Nos leemos pronto! :-)
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